29.5.07

Pausa en ti


Decidí callar,
para no tocarte con mi verbo,
pero este fuego,
intenso y caprichoso,
acabo sofocando
mis esfuerzos.

Cave una agujero
en el silencio
y hundí mis ojos
en las sombras,
para no verte,
para evitar
tocarte con mis miedos,
para ser,
aparte,
sólo tu testigo
y no desearte
sin remedio.

Decidí cerrar los ojos
y no tocarte a diario,
al verte,
pero tu imagen
pobló el encierro
de mi mente,
acaparo mi espacio
de inmediato
y fui hecho carne,
piel,
canto y afán.

Busque tu fuente
y esparcí mi voz
en tu cuerpo,
mi aliento en tu vientre,
y en tu carne
fui poeta,
te dí mi poesía,
esa lujuria de verbos
que se desnudan al verte
allí,
sincera y silenciosa,
provocando
el galope de mi canto
a tu alcoba,
y decidí entonces,
hacer la pausa
necesaria
para no terminar
consumido
en tu hoguera.

David E. Alvarado
El Salvador
®2007 DEARmente


En la foto: Florencia Perla, Argentina