Estoy seguro
de haber empezado ayer esta pagina,
sin embargo,
he vuelto a encontrarla vacía,
completamente vacía,
como si nunca en ella
hubieran pasado
esas horas de desvelo
que agoto entre letras;
y pienso que tal vez soñé
que estuve aquí sentado,
despierto,
escribiendo entre tanta impaciencia,
entre tanta ironía.
Estoy seguro
de haber iniciado ayer
esta pagina,
porque no tolero el silencio
que produce la noche
cuando no duermo
y castigo el insomnio
con este habito voluntarioso
de procrear palabras
desde el tintero.
Esta costumbre pues
de agotarme a mi mismo
con la violencia de los versos,
me da cierta certeza
para no sentir que deliro;
para no ceder a la locura.
Estoy seguro
de haber empezado ayer
esta pagina
pues es un acto impropio de mi conducta
olvidarlo,
y lo recuerdo.
Nunca olvido una lágrima sincera.
Nunca olvido una piel sincera.
Nunca olvido
que el silencio me sofoca
más que mis propias palabras
y estoy completamente seguro
de haber terminado ayer
exactamente
donde he iniciado ahora,
justo
cuando pienso en ti.