18.7.08

Cábala tardía


... alguna vez quisiste ser distinto.

Mañana vendrás a decirme
que mi cálculo era exacto.
Yo no estaré esperando
con la misma sonrisa en mis labios;
estaré quizás
un poco desierto,
al otro lado del espectáculo.

Estaré lejos.

Querrás dejarme
un mensaje en la ventana
justo donde yo
solía dejar mis versos colgados,
húmedos de deseo.

Ahí
sólo encontrarás
un manojo de ladrillos
revestidos de silencio.

Querrás darme explicaciones;
decirme que siempre
estuve en lo cierto,
que mi ecuación era exacta,
Que mi asíntota de sueños
era rigurosamente uniforme.

Era acertada.

Pero
no me encontrarás
en ninguna de esas calles
donde solía caer
de tanto quererte.

No me encontrarás
hundido en el café
o estropeando mi cena
con algún comentario utópico,
sofista.

Sólo asomará mi nombre
en algún viejo periódico clandestino
guardado en el jardín de la nostalgia.

No estaré esperando.

No estaré aquí,
ni en ningún lado.

En cuanto a mis preguntas
estoy completamente satisfecho
de saber que no hay respuestas.

En cuanto a mis respuestas
estoy
simplemente satisfecho
de haberlas dicho a tiempo.

En cuanto a ti,
jamás estaré satisfecho.

Mañana estarás buscándome
completamente convencida
que mi cálculo era exacto.
Yo no estaré cerca
para gozar un momento
ese lógico acierto contigo.


David E. Alvarado
El Salvador
©2008 DEARmente