
A manera de ser sincero
te explico mis palabras:
nunca estoy conforme
con todo lo que digo.
Nunca estoy del todo convencido
de mis quejas.
Las causas reales,
las verdaderas intenciones,
siempre están del otro lado de las letras.
No quiero confundirte
cuando afirmo que
ante tanta alarma,
ante tanta insistencia
la idea más próxima
siempre es la más vulnerable,
la más utópica,
la más seca.
Por eso nunca sé expresar exactamente
lo que pienso,
y asumo que nunca alcanzaré completamente
a escribir un poco de lo que siento.
Casi siempre exploto,
aunque me resisto,
en todo aquello
que ya no puedo
de ninguna forma
seguir llevado conmigo.
David E. Alvarado
El Salvador
©2008 DEARmente