Alguien escribió mi nombre sobre el río,
sobre el agua que se rompe bajo la cascada.
Allí suena,
suena,
suena...
se golpea con la piedras.
Es el llanto frío y solitario
que no alcanzas a distinguir
cuando amanece.
Alguien lo escribió en el cauce que da
en la ventana de tu vientre
y allí suena,
suena,
suena...
se golpea con tus ganas.